- Tiempo de Inversión
- David Ardura
Aunque ya no sea algo que estemos acostumbrados a ver, hubo un tiempo en el que los niños, en vez de relacionarse con los móviles, solían jugar entre ellos en un campo de fútbol o una cancha de baloncesto. La generación que tuvimos la suerte de disfrutar de esto sabíamos que siempre había un niño que era el dueño de la pelota y era una norma no escrita que ese niño, el dueño del balón, tenía una cierta preferencia a la hora de elegir la posición, reglas o tiempo del juego. Igualmente, sabíamos que nunca se discutía con él, pues corrías el riesgo de acabar sin jugar o, incluso de terminar el juego antes de tiempo.
A la vista de su evolución en los últimos meses, el mercado de bonos parece estar asumiendo ese rol del niño que se empeña en discutir con el dueño del balón. Si analizamos el comportamiento de las estimaciones que ha venido practicando el mercado sobre los recortes que tiene que llevar a cabo la Fed en este 2024, nos encontramos con que los inversores insisten, una y otra vez, en llevar la contraria al máximo organismo de política monetaria. De esta manera, nos olvidamos de que, por muy equivocados que pensemos que estén, las reglas del juego las marca el Banco Central y llevarle la contraria puede hacernos perder mucho dinero.